BA-LON-CES-TO

img_0288Una de mis aficiones desde pequeño es el baloncesto, un deporte que practicaba en los distintos colegios en los que he estado y con amigos en mis ratos libres. Un deporte que me enseñó los valores del trabajo en equipo, el compañerismo y por supuesto el respeto y es que como se dice de Las Vegas, lo que pasaba en la cancha se quedaba en la cancha; cuando se acaba un partido, dejábamos de ser contrincantes para ser compañeros de pasión.

Hace 8 años me diagnosticaron EM y tuve que dejar de forma forzosa de jugar al baloncesto, aunque al principio, y de forma un poco furtiva iba a uno de mis antiguos colegios y cogía un balón aunque fuera para botarlo y como podía, tirar algún tiro. Pero entre unas cosas y otras lo fui dejando; me fui apartando de mi afición porque sentía impotencia al no poder hacer lo que antes había hecho tantas veces. Lo fui dejando todo, incluso dejé de abonarme para poder ir a ver a mi equipo favorito que tantos buenos momentos me había dado…

Pero este año he dicho ¡BASTA! ¡Hasta aquí hemos llegado! Y es que no podía dejar que esta compañera de viaje tan caprichosa me quitase toda ilusión. Todo comenzó cuando en estos pasados Juegos Paralímpicos volví a vibrar cada vez que veía un partido de baloncesto sobre ruedas. Gente que a pesar de todos los problemas que pudieran tener, salían a la pista a darlo todo, gente que se caía y como un resorte se volvía a reincorporar, que no perdía la sonrisa cuando perdía y no se burlaba cuando ganaba, gente, al fin y al cabo, que ama este deporte tanto como yo lo amé.
IMG_0289.JPGPor eso este año he vuelto a abonarme para ver los partidos de mi equipo en casa, para volver a disfrutar de este deporte que tanto me ha dado, que me alegra, me distrae de malos pensamientos y me ayuda a soltar adrenalina.

Quién sabe si en el futuro incluso pueda volver a jugar unas pachangas con los amigos, o un simple 21, o… De momento, ya he dado el primer paso para reencontrarme con mi viejo amigo, ese que me dio tan buenos momentos, ese que me ha ayudado a ser como soy y al que sólo puedo decir, Gracias.

Sergio Fdez.

Un comentario de “BA-LON-CES-TO

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *