Es destacable la labor que hacen las distintas asociaciones de EM en todo el mundo, dedicando esfuerzos a la promoción y conocimiento de la enfermedad y de sus consecuencias, con el objetivo de que socialmente se tenga una imagen muy ajustada a la realidad.
Repasamos algunos «mitos», a veces muy fuertemente instaurados en esta sociedad.
DIEZ «MENTIRAS» SOBRE ESCLEROSIS MÚLTIPLE
1. La esclerosis múltiple es una sentencia de muerte.
Si bien en algunos casos, muy extremos, la em puede ser fatídica y terminal; en la mayoría de los casos, los afectados tienen una esperanza de vida «normal», similar a la de cualquier persona.
2. No hay tratamiento para la esclerosis múltiple.
Aunque todavía no tiene cura, si hay distintos tratamientos para la misma, especialmente para gestionar los síntomas y la progresión de la enfermedad.
Según el tipo de esclerosis que se padezca y la condición de cada persona, se procederá a un tratamiento farmacológico o/y ejercicios de tipo rehabilitador.
3. La esclerosis múltiple es contagiosa y hereditaria.
La EM en ningún caso es contagiosa; tampoco es directamente hereditaria, aunque varios estudios sugieren que algunos factores genéticos provocan que ciertas personas sean más susceptibles a desarrollarla.
4. Los afectados de esclerosis múltiple tendrán que usar una silla de ruedas.
Los afectados de esclerosis múltiple pueden sufrir problemas de movilidad que les impida desplazarse, pero se trata de un síntoma que no todos los afectados padecen.
Es más, se calcula que solo un 25% de los afectados se ve obligado a utilizar una silla de ruedas o un dispositivo de asistencia, bastón o andador, a lo largo de la enfermedad.
5. Las personas con esclerosis múltiple no pueden trabajar.
La mayoría de los afectados sigue trabajando y mantiene tras el diagnóstico una vida normal y gratificante.
En muchos casos es suficiente con introducir algunas adaptaciones en el lugar de trabajo. O también, puede buscarse otro trabajo, que se adapte a las nuevas capacidades y necesidades.
6. Las mujeres con EM no pueden tener hijos.
No hay ningún impedimento para que una mujer con EM no pueda quedarse embarazada.
En la mayoría de los casos, solo hace falta una buena planificación e interrumpir la medicación durante el periodo de gestación.
7. La esclerosis múltiple no es una enfermedad dolorosa.
En muchos casos la EM causa dolor físico en los afectados.
Se calcula que un 55% de las personas con EM experimenta un dolor significativo en algún momento a lo largo de la enfermedad.
Este dolor se puede manejar con diferentes tratamientos.
Muchas personas encuentran efectos beneficiosos en los masajes, la fisioterapia y el ejercicio físico, además de la punción seca o la estimulación nerviosa transcutánea.
8. La esclerosis múltilple solo afecta a las personas de raza blanca.
Es cierto que la prevalencia de la esclerosis múltiple es mayor entre la raza blanca, pero también se encuentra en otros grupos raciales, excepto en esquimales, romaníes y bantúes.
Otros como indios nativos americanos y japoneses tienen una tasa de incidencia muy baja.
Un estudio de la National MS Society en Estados Unidos, muestra que los afroamericanos que desarrollan EM sufren un tipo mucho más agresivo.
9. La esclerosis múltiple se puede curar mediante cambios de alimentación o con una actitud positiva.
La EM no tiene cura conocida, y aunque una dieta saludable y el optimismo son siempre aconsejables, en ningún caso comportan la cura de la enfermedad.
Se cree que la causa de la EM es una combinación de factores genéticos y ambientales.
10. La esclerosis múltiple es de «gente mayor».
Totalmente falso.
Es una enfermedad neurológica de adultos jóvenes, especialmente mujeres de 20 a 40 años, y la segunda causa de incapacidad de este grupo de población tras los accidentes.
Cada vez hay más casos a edades más tempranas, incluso en niños.
Carmen López
Fuentes:
www.observatorioesclerosismultiple.com
www.empositivo.org
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