Las autoridades sanitarias han recomendado la vacación del sarampión a los nacidos entre 1970 y 1980. Esta recomendación ha puesto sobre la mesa nuestras dudas sobre las vacunas y la esclerosis múltiple.

Siempre que nos enfrentamos a la decisión de vacunarnos dudamos si nuestra enfermedad o el tratamiento para la EM que nos están administrando están contraindicados. La Academia Americana de Neurología, en colaboración con el panel de expertos en inmunización encargado de elaborar las guías para la práctica clínica, publicó un resumen de las recomendaciones generales sobre vacunas para personas con esclerosis múltiple. Sus conclusiones fueron las siguientes:

• La evidencia científica respalda las estrategias preventivas para reducir el riesgo de infecciones, ya que éstas pueden desencadenar brotes.
• Las vacunas de la gripe, hepatitis B, varicela y tétanos son seguras para los pacientes con esclerosis múltiple.

Una revisión sistemática de los estudios publicados sobre vacunas y esclerosis múltiple, realizada en 2017, reveló que:

• No existen cambios en el riesgo de desarrollar esclerosis múltiple tras recibir vacunas frente a la gripe estacional, la hepatitis B, el virus del papiloma humano (VPH), sarampión-paperas-rubeola, varicela, tétanos, bacilo Calmette-Guérin, polio ni difteria.
• No se incrementa el riesgo de brotes después de la vacuna frente a la gripe estacional.

Las decisiones sobre los potenciales riesgos y beneficios de cualquier vacuna deberían adoptarse consultando con el equipo médico que nos atiende.

Consideraciones especiales

Las personas que están pasando por una fase de brotes serios, hasta el punto de que afectan a sus actividades diarias, deberían retrasar las vacunas que pudieran tener previstas en ese periodo al menos hasta 4-6 semanas después del inicio del brote.

Las vacunas inactivadas suelen considerarse seguras en personas que padecen esclerosis múltiple, incluyendo a quienes son tratados con interferón.

Los pacientes tratados con terapias que inhiben la acción del sistema inmunológico deben consultar con su neurólogo antes de vacunarse.

¿Qué sucede con la vacuna del sarampión?

Si tienes menos de 40 años has recibido, casi con total seguridad, las dos dosis recomendadas de la vacuna triple vírica (sarampión, paperas y rubéola), que se administra durante la infancia siguiendo las pautas del calendario de vacunación. Pero si tienes entre 40 y 50 años ya no es tan probable que estés inmunizado frente a esta infección, ya que en los años 70 del siglo pasado la cobertura vacunal era muy irregular.

El sarampión ha tomado protagonismo últimamente por la confluencia de dos factores: por un lado, el Ministerio de Sanidad y expertos en epidemiología han recordado la recomendación de que toda la población esté cubierta por la vacuna frente al sarampión. Por otra parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha confirmado que el aumento de casos de sarampión en Europa (pero no en España) que comenzó en 2018 ha continuado en 2019. Los aproximadamente 90.000 casos notificados en el continente durante la primera mitad de este año superan la cifra total registrada en 2018, que alcanzó los 84.462.

España ha registrado 233 casos de sarampión confirmados entre el 1 de enero y el 21 de julio de 2019, cifra que supone siete más que en todo el año anterior. Sin embargo, tal y como resaltan los especialistas, la situación no es en absoluto preocupante; todos los pequeños brotes proceden de fuera.

Como la vacuna del sarampión se realiza con virus atenuados no es recomendable vacunarse si tienes esclerosis múltiple y recibes un tratamiento inmunosupresor o inmunomodoficador. El número de casos desarrollados en España no es significativo pero en el caso de que estés en situación de riesgo consulta con tu neurólogo.

Estudios sobre seguridad de vacunas en pacientes con esclerosis múltiple

Una cantidad considerable de vacunas (aunque no todas las disponibles) se han sometido al escrutinio de los expertos para evaluar su eficacia y seguridad en pacientes con esclerosis múltiple.

• Un estudio publicado en la revista The New England Journal of Medicine mostró que las vacunas del tétanos, hepatitis B y gripe no incrementan el riesgo de brotes a corto plazo en personas con esclerosis múltiple.
• Un estudio de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades estadounidense (dentro del programa de vacunas), publicado en la revista científica Archivos de Neurología, descartó que las vacunas frente a la hepatitis B, la gripe, el tétanos, el sarampión y la rubeola incrementaran el riesgo de desarrollar esclerosis múltiple o neuritis óptica (que con frecuencia es el primer síntoma de esclerosis múltiple).
• Un estudio en el cual se incluyó a casi cuatro millones de chicas y mujeres adultas de los registros nacionales de Dinamarca y Suecia, publicado en la revista JAMA (Journal of the American Medical Association), descartó que haya un riesgo mayor de desarrollar esclerosis múltiple en 800.000 mujeres que recibieron la vacuna frente al virus del papiloma humano (VPH).

Cris Bajo