Son actores, actrices, showmans, conocidos por el gran público incluso a nivel internacional, pero también son humanos. Lo que les expone a los mismos problemas de salud que a todos aunque en muchos casos sus enfermedades no hayan trascendido públicamente. Otros, sin embargo, deciden “salir del armario” para revelar y visibilizar sus dolencias.

Esta semana el escritor y colaborador de Andreu Buenafuente Bob Pop, confesó en su programa Late Motiv que sufre EM aprovechando la presencia de Pedro Almodóvar presentando su última película Dolor y Gloria.
Creo que a estas alturas Bob Pop no necesita presentación pero para aquellos que no lo conozcáis diré que es un crítico de Tv, columnista, bloguero, escritor, cómico y subdirector del programa Late Motiv. Nos acostumbra cada noche a deleitarnos con su sentido del humor ácido e irreverente y de ironizar sobre temas actuales tanto políticos y sociales pero el pasado miércoles decidió revelar que sufre EM para darle normalidad a una enfermedad que padece desde los 23 años y de la que pocos eran conscientes. Con su habitual sentido del humor confiesa que encuentra en la película de Almodóvar un paralelismo con su dolencia porque describe a la perfección qué es el dolor que le acompaña. Tiene problemas motrices en la pierna y el brazo derecho impidiéndole escribir a mano. También, mandó un mensaje a los políticos para protestar contra los recortes en la sanidad pública porque gracias a ella estoy aquí.

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No es el único que decide desvelar la enfermedad, la actriz americana Selma Blair protagonista en Hellboy, apareció en la alfombra roja de la fiesta de la revista Vanity fair después de la ceremonia de los Oscar con un elegante traje de capa caminando con la ayuda de un bastón. Fue en Octubre del año pasado cuando le diagnosticaron EM y en estos meses ha tenido el valor de conceder una entrevista que ofreció al canal ABC News en la que contó los problemas que ha tenido que afrontar desde su diagnóstico. Relató que sufre de una disfonía espasmódica, la cual le impide hablar con normalidad, así como las implicaciones que lleva las esclerosis como las fallas motrices, dolor corporal y cansancio. A pesar de todo se muestra optimista pues con los tratamientos que mantiene los médicos le han indicado que podría recuperar el 90 % de sus habilidades en un año.

Otro caso es el de Jamie Lynn Sgiler también actriz y conocida principalmente por ser la hija de Tony Soprano en la famosa serie Los Soprano. Hace 3 años decidió conceder una entrevista a la revista People donde desveló que sufría EM y que no lo había contado antes porque no se sentía con fuerzas para referirse a ella. El diagnóstico le pilló con sorpresa a los 20 años durante la cuarta temporada de la serie. En ese momento, Sigler no se sentía enferma y no terminaba de creerse que aquello le estuviese pasando realmente. «No quería asumirlo porque no quería pensar que iba a formar parte de mi futuro. Pero ahora ya es parte de mi presente y no quiero sentir que es algo de lo que debería avergonzarme». Cuenta que en los últimos años la enfermedad ha ido a peor no puede correr o caminar durante mucho tiempo pero ahora está tomando Tecfidera, un medicamento que ha mantenido sus síntomas a raya durante los últimos seis años. Con su testimonio, la actriz quiere cambiar las ideas de la gente sobre lo que esta enfermedad significa y aspira a que las personas entiendan que sufrir esta enfermedad «no es el fin». Como la actriz, otros muchos rostros conocidos no han tenido reparos en compartir con sus seguidores diversas dolencias, entre ellos, Angelina Jolie, Michael J. Fox, Emilia Clarke o Hugh Jackman. Un testimonio con el que desean ayudar a muchas personas que se encuentran en su misma situación.
En el caso de Emilia Clarke, protagonista de “Juego de Tronos”; reveló que sufrió dos aneurismas y varias operaciones cerebrales durante la primera y segunda temporada de la exitosa serie en un artículo publicado en The New Yorker; donde además contó que estuvo “a punto de morir”.

La actriz que interpreta al personaje Daenerys Targaryen; fue sometida a dos operaciones que le provocaron “una ansiedad terrible” y ataques de pánico.
Detalló que a pesar de estar convencida de que no iba a sobrevivir; logró una recuperación más allá de sus “esperanzas razonables”. Clarke relató que en 2011 sufrió su primer aneurisma; cuando se encontraba en el gimnasio. Los médicos descubrieron que tenía una hemorragia subaracnoidea (HSA); que es un tipo de accidente cerebro-vascular potencialmente mortal que ocurre cuando un vaso sanguíneo estalla.
Dijo que tras ser intervenida quirúrgicamente, tuvo un ataque de afasia; (trastorno del lenguaje que se caracteriza por la incapacidad o la dificultad de comunicarse mediante el habla; la escritura o la mímica y se debe a lesiones cerebrales”.
Después de superar este problema la actriz regreso al rodaje de la segunda temporada de la serie pero se mareaba todo el tiempo y se sentía tan débil; que pensaba que se iba a morir”. En 2013, mientras representaba una obra en Nueva York; le practicaron otra operación para eliminar un segundo aneurisma pero esta segunda intervención fue más invasiva; pues debieron abrirle el cráneo.
El actor Michael J.Fox quizás es uno de los más conocidos fue diagnosticado de Parkinson en el año 1991 pero lo mantuvo en secreto durante 7 años. Desde hace varios años se ha convertido en uno de los defensores para encontrar la cura de la enfermedad y ha impulsado las investigaciones en torno al padecimiento a través de una fundación en donde recaudó 800 millones de dólares. Aspira a dejar atrás un mundo en el que el Parkinson está más visibilizado, más socialmente asimilado y más cerca de una Fox espera ayudar con sus palabras a otros enfermos de párkinson y mostrarles que ellos también pueden vivir la vida al máximo. «Alguien dijo: ‘Algún día, habrá una cura para la enfermedad de Parkinson, y será por ti'» “Fue la primera vez que realmente me impactó. Si eso sucede, es mucho más especial que cualquier película o programa de televisión».

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