«Yo no soy flor nacida para todos los vientos,
ni camino perdido para todos los pasos.
Yo no soy pluma suelta de destinos y acasos
arrojada a los aires cual despojo maldito.
Yo he nacido a la sombra de un mandato infinito,
de un misterio fecundo,
donde en letras de estrellas mi sendero está escrito.
Yo he venido a la vida con un nombre bendito.
Yo no soy hospiciano de las patrias del mundo».
(José María Pemán)
Hoy, una de nuestras ilustres compañeras, Cristina Bajo Polo, presenta su libro Ser sin cuerpo.
Fue una preñez larga, de años, de esas que sólo merecen los hijos de seres especiales. Una gestación que cuidó cada rasgo del feto por nacer, unas veces con sufrimiento, otras con alegría, con amor, con rabia, con ilusión, con fuerza, con sabiduría, con esperanza; tantos detalles vigilados al milímetro buscando la perfección de la criatura.
Su madre sabía que ese niño necesitaba una potente voz para cantar, llorar, reír, soñar, gritar; todo lo que significa existir en el difícil universo de las palabras atrapadas.
Fue un parto complicado y casi solitario, lleno de dolor sin anestesia, en el que faltó la sabiduría necesaria de una partera experimentada. Al fin, consiguió nacer y esta tarde previa a la Noche de los Libros nos es presentado para su bautizo pagano el niño de versos: Ser Sin Cuerpo.
Brindemos por su larga vida y exitosa vida.
Felicitemos a Cristina su fértil madre por volcarse en él
para que todos podamos disfrutarlo.
Y para celebrar este nacimiento, y para poner a la autora un poco más colorada, desde el grupo hemos decidido dedicarle unas palabras con lo que nos transmite.
«Es la sonrisa permanente aún en la tristeza desmedida, la hermosa luz fulgente con el poder de regalar alegría; la pincelada diferente que dibuja compañía.» Diego
«Alguna vez creí que podía escribir.
La EM me ha dado cosas que buscaba sin saberlo.
Estaba de bajón, en ese estado en el que parece que ya has tenido todo lo que podía ofrecerte la existencia y que por delante sólo hay un largo tobogán descendente.
Un amigo me habló de «Y yo con estos nervios», el blog que hacía un grupo con EM. Como tantos—pensé yo,—más terapia ocupacional para suavizar la caída. Aún así me acerqué. No sabía demasiado bien para qué. No tenía claro lo que me iba a encontrar. Pero desde el minuto uno les pertenecí. No eran un grupo de enfermos capitaneados por otra enferma más. Eran un conjunto de luchadores y con ellos una mujer que destilaba humanidad y empatía por cada milímetro de la piel. Una poetisa que exprimía el universo en cada verso hasta obtener ese zumo agridulce del dolor mezclado con la esperanza. Una voz inspirada, reivindicativa y vibrante que no aceptaba la derrota como respuesta. Quise formar parte de quienes uniéndose a esa voz alzaban las suyas propias.
Alguna vez creí que podía escribir. Ahora sé que puedo.» Ana Fdez. Montes
«Cris eres nuestro motor, no solo juntando letras sino la persona en quién fijarnos y pensar que rendirse no es una opción, ‘nuestro Arroyo del grupo’. No cambies, te queremos. Deseamos que tu libro sea el principio de tu carrera de escritora, porque ‘nena’ tu vales mucho.» Ángel Yance
«En mi opinión, lo bueno que tiene Cris es que es la misma cuando hablas con ella o cuando lees lo que escribe, en cualquier caso lo hace sinceramente, sin autocomplacencia ni sensacionalismo, describe la realidad de una forma tan clara y realista que no deja al que tiene enfrente ser autocomplaciente o sensacionalista, dándonos así no solo un ejemplo, también mucho ánimo.» Alejandro
«Nuestro modelo en el grupo va y saca libro, demostrando que esta enfermedad no nos inmoviliza y que contribuye a visualizar lo mejor de cada persona» Juan Carlos
«Entré en su vida para intentar ayudarla, y a los cinco minutos de conocerla supe que la historia se invertiría y sería ella la que me ayudaría a mí.
Desde ese momento me ha enseñado que la vida se afronta día a día, que una palabra certera es más eficaz que cualquier medicina, que malgastar el día sin sonreír es de escasa inteligencia, que el miedo puede ser nuestro aliado y que un corazón inmenso y una mente limpia y clara hacen que te olvides de que unas piernas no obedecen como debieran.
Cris, En pie, a tu lado, que es donde quiero estar. Siempre que tú me pidas que esté…
Fdo. Una tolili (orgullosa de serlo)» Sandra
«Hace muy poco tiempo que conozco a Cris. Como se dice:”la primera impresión es la que cuenta”, pues mi primera impresión, que luego se confirmó incluso se agrandó, fue que veía en Cris a una persona a la que no le vale un NO como respuesta, muy activa y perseverante.
Gracias a ella me ha cambiado la forma de afrontar la E.M., no sólo en sus “letras”, también en la forma de ser.
Muchas gracias Cris.» Mónica
«En este abrupto camino que nos ha tocado se desarrolla una particular sensibilidad a la hora de centrar lo realmente importante: encontrar perlas. Cris es una. Sabe canalizar a través de su poesía lo peor y lo mejor de la vida. Yo había abandonado este género y he vuelto gracias a esta perla, nuestra perla.
Posdata, definición de perla: persona que sonríe a la vida aportando lucha, vivencias y sentimientos positivos.
Nuestro modelo en el grupo va y saca libro, demostrando que esta enfermedad no nos inmoviliza y que contribuye a visualizar lo mejor de cada persona.» Ana Rosa
«Positiva, alegre, atrevida… resumiendo, valiente.
¿Te vienes al cine? Sí. ¿Al baloncesto? Sí. ¿Quedamos para comer? Sí. ¿Nos vemos mañana?… Da igual lo que le preguntes que sabes que estará dispuesta. Y si por lo que sea hoy no puede (todos tenemos días malos, médicos, etc), te dice: ‘pero mañana sí’. Gracias a Cris esto de la EM se hace más llevadero porque te comprende, te anima y te alegra el día en cuanto te dice 2 palabras.» Sergio Fdez.
«Se puede definir a nuestra poetisa con una sola palabra, VALIENTE, la esclerosis le deja inmovilizado el lado derecho de su cuerpo y aprende a comer, escribir, pintar y el resto de actividades cotidianas con la mano izquierda siendo diestra. Nada se la pone por delante.» Mª Ángeles
«¿Qué decir de Cris Bajo?, para mí conocerla ha cambiado mi forma de ver la vida y afrontar la enfermedad. Ella es mi referente, el espejo en el que me miró en mis horas más bajas, es el tesón, la fuerza de la superación, la perseverancia que busco para no decaer. Cada vez que la miro me recuerdo a mi misma el compromiso de levantarme y superarme cada día a pesar de las dificultades.
Es admirable la capacidad para irradiar felicidad y alegría alrededor de ella. Cris es grande por dentro y por fuera, pero ante todo una mujer que siempre tiene una sonrisa que ilumina y lo llena todo. Después de conocerla sientes la necesidad de nutrirte y absorber de ella. Y cuando me despido de ella me digo: ¡Jo, qué suerte y orgullo tengo de haber conocido a esta pedazo de mujer!» Celia Rodríguez
«Cris eres nuestro referente y espejo en el que mirarnos y aprehender cada día, algún reflejo de la gran persona que eres.
No cambies nunca por favor, porque eres bella por dentro y por fuera.» Carmen
Grande mi amiga .. Que te quiero !!