Quiero comentar en este pequeño articulo la importancia de un comportamiento cívico y respetuoso de todo el mundo, especialmente de los dueños de los perros en nuestras calles.

Además de todas las barreras arquitectónicas, culturales y de todo tipo que nos encontramos cuando salimos a la calle los afectados de la «enfermedad de las mil caras»; cada vez que ‘se atreve a salir» una persona en silla de ruedas, se encuentra con algo mas: los excrementos de los perros. He de decir que los únicos culpables de este «despiste» evidentemente son los irresponsables propietarios.

¿Y qué tiene que hacer la persona que va en silla de ruedas cuando llega a la calle? ¿Solo mirar al suelo para esquivarlos? 

¿Antes de meterse en casa; fregar o que le frieguen las ruedas de la silla con lejía?

 Por favor seamos un poco mas respetuosos con los demás.

Y pensemos en todo lo que puede pasar si no recogemos los excrementos de nuestra querida mascota.

 ¿En qué país estamos en que el Ayto. de Zaragoza esta pensando en analizar el ADN de las deposiciones caninas de la calle sin recoger para multar posteriormente a los dueños?

 ¿Hasta ese punto hemos llegado?

¿Es tan difícil realizar este acto?

Sinceramente como dueña de perros y enferma de esclerosis múltiple creo que no.

 Por favor pido que todos los dueños de perros reflexionen sobre este tema que tiene tan sucias las calles.

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