¿Qué te parece si vamos al cine?

img_0461El musical de Damien Chazelle conquistador de los premios Oscar con sus 14 nominaciones nos llena la mirada de color, ritmo, Jazz y sueños por los que darlo todo. Agridulce como la vida te hará replantearte muchas cosas. Tanto su director como sus protagonistas Emma Stone y Ryan Gosling se han ganado sobradamente cualquier reconocimiento que les den.

—¿Qué te parece si vamos al cine?—le pregunté.
—Elige tú la peli.
Esa era la “mía”, y no por ser el nombre de la prota de la historia, sino por escoger algo por lo que nunca habría optado mi acompañante.
— La la land ¿Hace?
—¿En serio que te apetece ver un musical? ¡Qué cursilada!
—Puro morbo, quiero ver la película galardonada con más globos de oro del toda la historia del festival de Venecia. Además, aunque cuando la veamos todavía no habrán dado los Oscars todo apunta que se va a comer más hombrecillos dorados que si fuese una cinta caníbal.
Seguro que es estupenda; los críticos le dan una valoración media de 4,2 sobre cinco. Los más entusiastas son los norteamericanos ¿por qué será?
Así que pese a su reticencia inicial vimos a Emma Stone haciendo de Mía y entendí como la historia escrita y dirigida por Damien Chazelle se había lanzado a volar arrastrada por sus siete globos de oro como si fuesen globos de helio, para flotar sobre todas las competiciones hasta aterrizar en Hollywood con 14 nominaciones algo sólo conseguido por Titanic y Eva al desnudo.

Argumento
Mia (Emma Stone) es una camarera que sueña con ser actriz mientras se presenta a castings. Sebastian (Ryan Gosling) es un pianista que toca en locales donde nadie escucha, un repertorio que detesta tocar y desearía abrir su propio local para salvar de su inexorable agonía al jazz clásico.
Cuando los caminos de Mia y Sebastian se unen y surge el amor, descubrirán que el precio de los sueños individuales puede ser demasiado caro.

img_0462
Género
La película retoma el musical tradicional, lo embute en el mundo de hoy y sale victoriosa del intento. Se trata de una historia muy al estilo Hollywood, (como tiene que ser) mezcla de comedia, drama y mundo actual donde el éxito personal compite muy seriamente con el romanticismo.
Su joven director (31 años) Damien Chazelle explica el mensaje tan ambicioso como sencillo de su tercer largometraje:
«Nunca se debería dejar de soñar. No importa cuánto se demore o lo mal que puedan ir las cosas, siempre debería haber espacio para los sueños, para la esperanza, para la alegría y el amor, la belleza y el arte.»
Ahí queda eso. Además lo vuelca en imágenes y lo expresa a fuerza de música de jazz, bailes casi acrobáticos sin truco ni cartón, color como si hubiésemos entrado en un cuento infantil e imágenes oníricas tan mezcladas con las reales que se hacen difíciles de separar.

Homenaje en el título
que hace referencia a la ciudad a la que se trasladó hace seis años para hacer cine: Los Ángeles, su abreviatura es LA, juega así con la musicalidad del “lalaleo” y la ciudad del cine: la tierra del la la es Los Ángeles. Lo que no necesitaba mayor aclaración en inglés se pierde en español, así en Latinoamérica lo aclaran centrándose en el aspecto romántico y aparece como: La La Land: Una historia de amor. En España los distribuidores deben de ser un poco menos pastelazos y se fijan en la parte del cine y el glamour de los actores: La ciudad de las estrellas – La La Land. Supongo que lo de la tierra del lala les sabía a teletubies.

img_0463
Arranca fuerte, con el atasco del baile inicial, para rodarlo Damien Chazelle cortó la autovía dos días. No debió de hacerles demasiada gracia a sus usuarios, pero el resultado es una señora coreografía con alusiones a «Singing in the Rain» y «Broadway Melody of 1940» a la altura, si no por encima de las grandes clásicas.
El jazz y su actualización son temas sobre los que Damien Chazelle reflexiona: «¿Se debería actualizar, modernizar para adaptarlo a la actualidad? ¿Si lo haces, estás pervirtiendo esa forma de arte?» le atrae tanto que sus tres películas están protagonizadas por músicos de esta índole.
El musical clásico se convierte en vía de valores materialistas, superficiales, banales y egoístas. Sí, están en nuestro mundo todos lo sabemos. Sí, están contados de una forma tan perfecta que merecen todos los elogios, pero es terrible y creo que ese es, para mí, el mayor mérito de la obra que parece decir: ojo a lo que te voy a te voy a contar porque es así y no puede ser de otra forma.
El encuentro de chica conoce chico de la comedia romántica se vuelve a soñador conoce a soñadora y se unen para conseguir sus sueños como sea.

El largo epílogo es necesario porque es ahí donde entiendes, por si no te habías dado cuenta, que el amor entre ellos era verdadero solamente porque habían aceptado todas sus condiciones. La mirada que se cruzan al final dice tantas cosas que solo por ella se puede soportar la ideología de los dos pavos. Y los llamo pavos porque hay mucha adolescencia en sus vidas.
En fin, muy buena, muy actual, muy bien interpretada, muy colorida, muy musical, muy viva el éxito, ¿qué éxito?, y con happy end para ellos y para quien comparta sus valores estelares.

Ana Fdez.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *