La astenia primaveral, los cambios bruscos de temperatura y la esclerosis múltiple

Es cierto que las temperaturas extremas empeoran transitoriamente los síntomas de esclerosis múltiple. El frío  provoca rigidez muscular, espasmos y dolor. El calor en cambio provoca problemas de debilidad, fatiga y equilibrio. La inflamación es mayor en primavera y verano. Sin embargo los cambios bruscos de temperatura pueden ser peores que las temperaturas extremas tanto…